martes, 19 de diciembre de 2017

Reografía: cartografías de la realidad


Aquí les compartimos la página web de "Reografía".
     Así como la geografía se distingue de la geología, grosso modo, porque aquélla describe mientras que ésta explica, aquélla impele a ir a ésta y ésta se justifica en aquélla, aquélla funda a ésta y ésta fundamenta a aquélla; así la reografía (como descripción filosófica de las cosas) antecede -en el orden de la fundación, no en el de la fundamentación- a la reología (como explicación filosófica de las cosas). Con impelente lema escotista, la web afirma de entrada que nulla res differt realiter a sua realitate, "ninguna res difiere realmente de su realidad"; cada cosa apela a sí misma, remite desde sí (en el logos) hacía sí (mediante la razón). Es por esto que aun en nuestros actos intelectivos, la inteligencia no hace sino actualizar lo que la cosa ella (rea illa) ya es de suyo. Nótese si no: la realidad de que un bastón parcialmente sumergido en agua aparezca desde sí mismo como roto, remite al descubrimiento de las reales leyes de la difracción; la realidad de que, estando parados en ella, parezca que la Tierra no se mueve, remite a una realidad más profunda como la de las leyes de los sistemas inerciales; así la totalidad de lo real, omnitudo realitatis. Si no fuera porque lo "inmediato" es formalmente real, ¿de dónde iba a obtenerse la realidad de lo "mediato"? La inteligencia no se basta a sí misma; sería incapaz de explicar nada. Ciertamente, previo a las teorías explicativas (de la razón), se requieren análisis descriptivos (del logos), so riesgo de caer en ingenuidades; es por ello la reografía el hilo de Ariadna que nos mantiene unidos a las cosas cuando la razón anda su marcha reológica. Pues bien, reografía es descripción de lo real, una red cartográfica que mapea -o intenta mapear- su respectividad constitutiva, por ello este sitio web -nunca mejor dicho- es un sitio transdisciplinario. Arte, ciencia y filosofía realiter surgen de la realitate de toda res: la realidad siempre "da de sí", siempre es "más"; o como solía decir Pascal: "más se cansará la inteligencia de concebir, que la realidad de proveer".
     En esta web se presentan varias notas procedentes, en su mayoría, de asuntos salidos desde la Fundación Xavier Zubiri de Madrid, España, particularmente de algunos de sus alumnos y algunos de sus profesores. Dejamos el enlace para que la visiten y la compartan: ww.reografia.blogspot.com

viernes, 20 de octubre de 2017

Conferencia: La realidad de los sistemas físicos


La realidad de los sistemas físicos (handout)
Carlos Sierra-Lechuga, Instituto de Filosofía, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.

Fundación Xavier Zubiri, Madrid. 03/noviembre/2017

“En mi libro «Sobre la esencia» me fijé, para mayor claridad,
casi exclusivamente en la suficiencia constitucional de sistemas”.
-Xavier Zubiri, Inteligencia sentiente: inteligencia y realidad (p. 204).

Esta es una investigación de metafísica que, con fundamento en aspectos del pensamiento de Zubiri, estudiará la realidad de los sistemas físicos. Luego de mostrar el prospecto de este trabajo (introducción), veremos de dónde surge la idea general de sistema (presentación), pasaremos revista a la historia de quienes pensaron los sistemas (tradición), mostraremos el aporte crucial del propio Zubiri (posición) para, con todo ello, probar que sólo los sistemas físicos tienen constitución (conclusión).

I. Introducción
A) Justificación.
B) Problema.
C) Hipótesis: sólo los sistemas físicos tienen constitución.
C.1) En un sistema, la unidad del todo es no sólo mayor que la suma de las partes, sino anterior a ellas.
D) Consecuencias proyectivas que NO trataremos aquí.

II. Presentación
A) Noción común de sistema.
B) Filosofía de sistemas y metafísica de la sustantividad.
C) El horizonte analítico.
Ejemplos de pensamientos surgidos del h-análisis:
1) Descartes. 2) Laplace. 3) La Mettrie. 4) Lagrange.
D) El h-análisis en problemas, el surgir de los sistemas.
-Casos concretos de problemas: 1) La especialización de la célula. 2) El lenguaje. 3) El desarrollo primigenio de los organismos. 4) Los conjuntos matemáticos.
-Ejemplos de teorías e hipótesis: 1) El mecanicismo en la biofísica. 2) La teoría sintética de la evolución en biología. 3) El vitalismo en biología. 4) La Gestalt en psicología. 5) El organicismo en biología.
E) El problema metafísico: la substancia.
Pensamientos que sostienen la definición de substancia:
 1) Aristóteles. 2) Tomás de Aquino. 3) Galileo. 4) Newton.

III. Tradición.
A) Criterio para historiar la tradición filosófica de los sistemas.
A.1) Momento negativo.                      A.2) Momento positivo: la realidad de los sistemas físicos.
A.3) Un origen temporal de la tradición.
Apéndice. el «Zubiri científico» y su etapa «estrictamente metafísica».
B) La tradición de los sistemas físicos.
B.1) Antes de Zubiri.
a) Henri Bergson, 1907, L'évolution créatrice: originalidad.
b) A.N. Whitehead, 1929, Process and Reality: actividad.
B.2) Durante de Zubiri.
a) Nicolai Hartmann, 1939, Der Aufbau der realen Welt: autonomía.
b) Ludwig von Bertalanffy, 1949, Das biologische Weltbild: funcionalidad.
B.3) Después de Zubiri.
a) Ludwig von Bertalanffy, 1968, General systems theory: generalidad.
b) Ervin Lazslo, 1972, Introduction to Systems Philosophy: no reduccionismo.
c) Ilya Prigogine, 1977 (ca.), La termodinámica del no-equilibro: irreversibilidad.
d) Nicholas Rescher, 1996 y 2000, Process metaphysics and philosophy: ausencia de substancia.
e) James Ladyman, 2007(ca.), Ontic structural realism: prioridad de la estructura.
C) Definición de sistema.
IV. Posición
A) Asimilación de lo anterior por Zubiri.
B) Suposición noológica.
C) «Sustantividad» λέγεται πολλαχῶς.
C.1) Sustantividad descriptiva.
a) Primer momento del recorrido descriptivo.
b) Segundo momento del recorrido descriptivo: sistema descriptivo.
c) Tercer momento del recorrido descriptivo.
1) Unidad primaria.    
2) Ciclicidad operativa.
3) Posición.                 
4) Clausura constitucional.
d) Resultado: sustantividad (descriptiva).
C.2) El tránsito del «sistema de referencia-sistema» al «esbozo-sistema».
C.3) Sustantividad explicativa.
a) Tipificación de la unidad constitucional       
b) Sistema de razón.
c) Sistema y sustantividad.                             
d) Notas de la sustantividad de razón.
e) La razón formal de la sustantividad de razón.
D) Definición de sustantividad (sistemática).
E) Cotejo «sistema – sustantividad».

Autor
Noción
Noción zubiriana
Bergson
originalidad
unidad primaria
Whitehead
actividad
ciclicidad operativa
Hartmann
autonomía
clausura o autosuficiencia
Primer Bertalanffy
funcionalidad
posición
Segundo Bertalanffy
generalidad de la noción
formalidad de la noción
Laszlo
filosofía de sistemas
metafísica de la sustantividad
Prigogine
irreversibilidad
dinamicidad
Rescher
ausencia de substrato
crítica de la substancia
Ladyman
prioridad de la estructura
respectividad

V. Conclusión
A) Sobre la constitución.
B) Recuento.
C) Tesis: sólo los sistemas sustantivos son físicos.


martes, 5 de septiembre de 2017

¿Cuántos filósofos han padecido la miseria y cuántos scholars de esos filósofos se han enriquecido viviendo a costa de ellos?


¿Cuántos filósofos han padecido la miseria (en cualquiera de sus formas: exilio, despido, soledad, pobreza, excomunión y exclusión de la universidad, la muerte, etc.) y cuántos scholars de esos filósofos se han enriquecido (en cualquiera de sus formas: fama, empoderamiento, colocación, decanatos, cargos universitarios, publicaciones, patrocinios, becas, sueldos cuantiosos, etc.) viviendo a costa de ellos?
Han sido al menos dos la veces que, habiendo enviado textos filosóficos para su publicación en revistas académicas, entregadas ahora a iterar el modelo formal de las ciencias naturales, dejando atrás el ensayo y el artículo filosóficos para dar paso a los papers propios de éstas, me han sugerido modificar mis textos por ser «poco académicos»; aconsejándome asirme a un autor, comentarlo, descubrir algo nuevo en él que nadie haya visto o compararlo con otros autores. Lo que sea, pero siempre sin dejar el seno de un maestro ya consagrado.
            Esta vez, luego de un dictamen de «publicable, pero con modificaciones», donde «modificaciones» significa prácticamente escribir otro texto (ahora sí, un paper), y mientras pensaba en cómo modificar mi texto para hacerlo «más académico», volví a sentirme incómodo por el rasero con que la academia acaba con los filósofos. Fue entonces que me puse a escribir, más bien que otro «paper», un prefacio a ese texto con la ingenua esperanza de que tal vez con él los árbitros leerían con nuevos ojos mi artículo. Lo escribí, pero no ya para que se publique el texto a que debía anteceder, sino porque la verdad necesita expresarse y aclarar, a muchos, la mente. A pesar de que este breve texto no hará que se publique mi artículo, quiero, sin embargo, que se lea; porque estoy seguro de que no soy el único al que el hálito filosófico se le va apagando de a poco por el contacto con la realidad efectiva del estado actual de la academia, lugar que –velis nolis– hoy empareda el cauce de la filosofía.
Por eso, os lo comparto, cada vez más convencido de que la crisis actual de la filosofía está, sí, en una «generalizada ausencia de vida intelectual», pero que sin duda alguna esta ausencia de vida intelectual está siendo henchida por quienes, encargados en principio de procurarla, en la práctica no hacen sino mancillarla, relegando entre otras cosas a uno de sus frutos –la filosofía– a la palabrería insustancial con que se rellenan los requisitos para obtener grados y contratos.
            El prefacio iba a ser este:


En el presente texto ensayaremos una propuesta de filosofía primera, presentando el problema de la realidad y de la existencia. Insisto en la palabra «presentar», porque no haremos más que eso: presentarla en público; desarrollar una filosofía propia lleva años y no puede darse en un texto de estas dimensiones nada más que una mera presentación.
            Por lo mismo, permítaseme hacer la siguiente aclaración. Junto con Xavier Zubiri, filósofo de tomo a lomo, veremos que el acto de intelección intelige siempre realidad; es lo que desarrolló en toda su noología, como veremos. Pero, ya no junto con él sino andando por cuenta propia, veremos que esa realidad inteligida es inteligida según diversos modos (lo que desde ya hace un tiempo he distinguido como «consistencia», «existencia» y «subsistencia»), mismos que varían en función del contenido real de esa realidad inteligida. Enseguida lo veremos. Es aquí donde conviene advertir la aclaración. El presente no es un trabajo que comente la filosofía de Zubiri ni de nadie; lo que tratamos aquí no es ni repetir ni replicar al maestro, queremos superarlo, toda vez que «superar» signifique también, como en la palabra alemana «aufheben», asumir; preservar pero adelantando. Por eso hablé de ensayar y presentar una propuesta de filosofía primera; cabría agregar: propia. En efecto, sin una constante apropiación que filósofos posteriores hacen de filósofos anteriores, no cabría hablar de una auténtica «historia de la filosofía». Sin superar y asumir a título personal algo del pensamiento del maestro para luego decir algo más, no habría historia de la filosofía sino sólo un mero archipiélago de «filósofos» que no tendrían nada más en común que ese epítome difuso que los etiqueta así por no hacer otra cosa que hablar de temas que no caben en ninguna de las demás ciencias. Este «más», que un filósofo posterior agrega respecto del anterior, es justo la razón de ser de la historia, que avanza, si quiera de a poco, en la consecución de verdades y en los hallazgos, por modestos que sean, de nuevas esquirlas de la totalidad de lo real. Pues bien, este de aquí no es un artículo que comente a Zubiri; si al lector interesa conocer a Zubiri por cuanto tiene él que decir por sí mismo, recomiendo –como lo he hecho siempre– vaya y lo lea. Yo lo he leído, y el resultado de ello me ha llevado a presentar lo que aquí ensayo; no a comentar a mi maestro. Me incita el pensamiento de Zubiri, más que a comentarlo, a montarme sobre él para, asimilándolo como precedente mío (como de cualquier otro filósofo que hoy en día quiera filosofar), pensar por cuenta propia –intentarlo siquiera. ¡Y cómo sería de otro modo!, si él mismo es quien me ha dicho que “sólo se aprende filosofía poniéndose a filosofar” [NHD, 5ª, 118], no comentando; puede hacerse –comentar– pero por el bien de la filosofía misma ha de llegar el momento en que eso pare. Por ello, a la frase de Zubiri cabe agregar: «no se puede hacer filosofía sin filósofos», y los filósofos son tales en la medida en que, por un esfuerzo personal –por raquítico que sea–, se atreven a montarse sobre sus maestros, dejando atrás el hábito escolar y estudiantil de tumbarse bajo ellos. Coincido, por eso, con el maestro cuando dice:

De lo que se trata es de que, aun admitiendo filosofías ya hechas, esta adscripción sea resultado de un esfuerzo personal, de una auténtica vida intelectual. Lo demás es brillante “aprendizaje” de libros o espléndida confección de lecciones magistrales. Se pueden, en efecto, escribir toneladas de papel y consumir una larga vida en una cátedra de filosofía, y no haber rozado, ni tan siquiera de lejos, el más leve vestigio de vida filosófica [NHD, 5ª, 28].

Y coincido no porque lo haya dicho «el maestro», hablaba yo antes de parar el tren del «master dixit», sino porque tales palabras me impelen a pensar por mí, aunque sea equivocándome, más que a consagrarme como un «zubiriano». Nada más contrario al espíritu del maestro Zubiri que hacerse su scholar; un zubiriano lo será con honor cuando haga el trabajo de un filósofo, no el de un biógrafo intelectual. Eso, filósofo, quiero ensayar a ser en el siguiente texto; repito, por eso, que no espere el lector aprender mucho sobre Zubiri en estas líneas. Recuérdese que muchos entramos a la Facultad movidos por la auténtica voluntad de llegar a ser filósofos; es una pena que otros muchos, ya «del otro lado del pupitre» y habiendo perdido el rumbo de lo que querían ser, dedicándose tan sólo a historiar un pensamiento que no es el suyo, decidan quién habla y quién calla. Así pues, valgan estas palabras para aclarar que en lo que sigue tomo del maestro todo cuanto ayude a que mi pensar ande su marcha, pero, en última instancia, lo que viene es mío. No se trata, sin embargo, de un huero afán de originalidad, en el que se prefiera errar con tal de mantener la custodia de un pensamiento señero; nada más alejado de mi intento. Se trata de dejarse mover honestamente por la investigación, aunque esto signifique que al final haya que ir por libre; pero es que «ir por libre» no es, tampoco, descubrir el agua fría, sino montarse a hombros de los maestros para poder ser algo más que alumno. La mejor forma de retribuir a la historia de la filosofía es, contrario a lo que hoy se exige hacer, menos historia y más filosofía. No es, pues, prurito de erudición que se mueve por un afán de originalidad, sino vida intelectual impelida irrevocablemente por una voluntad de verdad, por un apetito de realidad. Aunque la siguiente presentación de filosofía primera no resulte ser más que un ejemplo de mi derecho a equivocarme, tendré la infravalorada facultad de poder decir que este pensamiento, aunque errado, es mío.

Carlos Sierra-Lechuga,
Madrid, septiembre de 2017.

jueves, 8 de junio de 2017

Conferencia: "¿Qué es filosofía? Una respuesta de Xavier Zubiri"

En Madrid, la Meta Librería invita a la conferencia:

"¿Qué es filosofía? Una respuesta de Xavier Zubiri"

pronunciada por el Dr. © Carlos Sierra-Lechuga (Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Chile).

Resumen
La filosofía es la ciencia que se busca, mas si ha de buscarse sesudamente, también ha de encontrarse. Parece, en nuestros nublados tiempos, que todo aquello que no encaja ni en las ciencias ni en las artes ha de ser nombrado «filosofía», sin más. Cuando alguien hace filosofía de la ciencia es porque habla de ciencia sin hacer ciencia, cuando alguien hace filosofía del arte es porque habla de arte sin hacer arte. ¿Es filosofía lo que hacen? Tanto para poder decir que sí como que no, en todo caso hay que tener bien claro qué sea la filosofía. En esta ocasión hablaré por Xavier Zubiri, quien ha tenido a bien la atención de respondernos clara y expresamente. Muy a pesar de que toda definición sea cuestionable, habremos de llegar a una precisa reconstruyendo lo que el filósofo español ha dicho a propósito. Es que en el fárrago de «filosofías» segundas en el que nos encontramos hoy, cabe preguntar si en verdad secundan algo. Vale, pues, volver a tratar a la filosofía como primera. Donde todo es filosofía nada es filosofía, porque carece de peso propio. Es así que sostendremos y explicaremos que la filosofía es un conocimiento metafísico de lo físico.


El día 22 de junio de 2017, a las 19:00hrs, en nuestra sede (ubicada en la calle Joaquín María López, 29, Madrid / Metro cercano: Islas Filipinas, L7).

Cuota para la librería: 5 euros.

Reseña del autor
Carlos Sierra-Lechuga, mexicano, es Candidato a Doctor en Filosofía por el Instituto de Filosofía de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), en Chile. Becario de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Chile). Ha publicado en más de veinte ocasiones diferentes y dado más de una treintena de conferencias, entre las que destacan sus ponencias en congresos organizados por el Ian Ramsey Centre de la University of Oxford y el Faraday Institute de la University of Cambridge. Asimismo, ha sido conferenciante en diversos centros, tales como la UNAM, la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, la Pontifícia Universidade Católica do Rio de Janeiro, el Seminario Teológico Centroamericano, la Universidad Católica del Maule, la PUCV, entre otras. Realizó una estancia de investigación en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (México) y actualmente realiza otra en la Fundación Xavier Zubiri de Madrid (España). Ha sido profesor en la Universidad Pontificia de México. Su investigación doctoral, dirigida por el Dr. Esteban Vargas (PUCV), se centra en las convergencias entre la metafísica y la ciencia, particularmente entre la filosofía de Xavier Zubiri y la filosofía de sistemas.

domingo, 7 de mayo de 2017

Nuevas de 2017

Antonio González, Ángel González y Diego Gracia, en la Fundación Xavier Zubiri.
Con mucho agrado, me complace dedicar este apartado a compartir mis actividades académicas en lo que va de 2017.
     
     Desde febrero del corriente año, me he radicado en Madrid, España. Desde entonces, hago una pasantía de investigación doctoral en la Fundación Xavier Zubiri, con el fin de trabajar estrictamente en la tesis, usando su acervo bibliográfico y el Archivo Zubiri. 

     Además, he tenido a bien tomar clases que contribuyan no sólo a la investigación particular del doctorado, sino además al bagaje filosófico como tal; es así que asisto a ocho actividades mínimas tales como: 

     Cursos inscritos: 
  • Lunes: Introducción a la Filosofía de Xavier Zubiri, con Ángel González, Antonio González, Diego Gracias, entre otros. Fundación Xavier Zubiri
  • Miércoles: Historia de la Filosofía Medieval, con Ángel González. Fundación Xavier Zubiri
  • Jueves: El problema del mal, con Antonio González. Fundación Xavier Zubiri
  • Viernesa: Seminario de análisis de textos, director Diego Gracia. Fundación Xavier Zubiri
  • Viernesb: Seminario de investigación, director Diego Gracia. Fundación Xavier Zubiri
José Manuel Sánchez Ron,
Javier Ordóñez y Paula Olmos.
    
  Cursos de oyente: 
  • Martes: Historia de la ciencia contemporánea, con Javier Ordóñez. Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Autónoma de Madrid
  • Jueves: Filosofía de la ciencia, con Paula Olmos. Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Autónoma de Madrid
  • Viernes: Historia de la ciencia, con José Manuel Sánchez Ron. Facultad de Ciencias, Universidad Autónoma de Madrid. 
Arriba: José Luis Mora (UAM),
Rafael Orden (UCM)
y Ambrosio Velasco (UNAM).
Abajo: Con el biblista Pedro Zamora (SEUT);
con el Físico Cristóbal García (UNAM).









Y, por último, resta decir que eventualmente también he asistido a algunas conferencias:
  • 07 de Marzo: La mujer y la Reforma (SEUT, Facultad de Teología), con Mireia Vidal.
  • 27 de Marzo: Encuentros con la filosofía iberoamericana (UCM,UAM, UNAM-España), con Ambrosio Velasco.
  • 24 de Abril: Ciencia sin fronteras (Embajada de México en Madrid), con Cristóbal García, "Chico Partículas".




"Yo me bajo en Aluche, yo me quedo en Madrid".